En los últimos años, en los que se ha popularizado la conversación sobre las tecnologías que permiten conectar el mundo físico (real) con elementos generados digitalmente (virtuales), uno de los conceptos que ha surgido es el de la realidad extendida.
Lo cierto es que la realidad extendida no es exactamente una tecnología específica, sino que aglutina el uso de varias tecnologías. A continuación, te intentamos explicar a qué nos referimos cuando hablamos de realidad extendida y cuáles son sus componentes.
Además, echamos un vistazo a los retos a los que se debe enfrentar para que su implantación sea efectiva y cumpla con las expectativas que se han generado en torno a ella, y te contamos cómo se está aplicando realmente y cuál es su verdadero potencial en la actualidad.
Qué es la realidad extendida
El término realidad extendida (extended reality, XR) sería lo que en lingüística se denomina “hiperónimo”, es decir, que su significado engloba al de otras palabras o expresiones. En este caso, la realidad extendida abarca a las tecnologías que permiten fusionar el mundo real y el virtual.
Se llama realidad extendida porque, a través de esas tecnologías, es posible “extender” (o quizás sería mejor decir “expandir”) la realidad. Nuestro mundo real se transforma con el uso de tecnologías para crear experiencias inmersivas e interactivas. No se trata únicamente de solapar estos dos mundos, sino de que se relacionen entre sí.
La idea que subyace es que, con el uso de la realidad extendida, podemos “meternos” en un entorno eminentemente digital (con objetos o escenarios recreados digitalmente), pero en el que podemos actuar como lo haríamos en el mundo real.
Esta idea de fusionar mundo real y virtual, junto con la posibilidad de interactuar en ese entorno mixto, es la que está en la base del famoso metaverso. Pero la verdad es que, a efectos prácticos, en la actualidad, todavía es aventurado hablar de un “universo” digital que replica la realidad.
Por el momento, la realidad extendida incluye experiencias que son muy valiosas y útiles en múltiples sectores, pero, valga la redundancia, no está lo suficientemente extendida como para que sea un metaverso avanzado.
Componentes de la realidad extendida
La realidad extendida engloba la realidad virtual, la realidad aumentada y la realidad mixta. Veamos brevemente en qué consiste cada uno de estos componentes de la XR:
Realidad virtual
Los dispositivos de realidad virtual (gafas, cascos) ya se han convertido en un gadget más. Estos nos permiten introducirnos en un entorno simulado digitalmente en 360° con imágenes y sonidos muy realistas y, a veces, acompañados de otros aparatos que se integran en la experiencia (por ejemplo, los rodillos para bicicleta). Además, estas experiencias son estereoscópicas, es decir, tridimensionales, lo que hace que el usuario tenga sensación de profundidad, distinguiendo qué objetos están cerca o lejos.
Realidad aumentada
La realidad aumentada es una tecnología que permite superponer elementos digitales, como información u objetos en 3D, sobre un espacio físico. La forma más sencilla y accesible de hacer esto hoy día es a través del móvil, utilizando la cámara que lleva integrada. Antes, para activar estas experiencias solía hacer falta descarga una aplicación, pero ahora es posible acceder con la tecnología Web AR, directamente desde el navegador, sin tener que descargar o instalar componentes adicionales.
Realidad mixta
La realidad mixta se define como una combinación de la realidad virtual y aumentada. Gracias a unos visores especiales es posible alternar entre experiencias de realidad virtual y realidad aumentada.
A modo de ejemplo, imaginemos una experiencia en la que construimos un castillo digital sobre la mesa de nuestro salón. Mientras que las piezas son completamente digitales (virtuales), el resto de elementos de nuestro salón son reales. Cuando nuestra construcción está lista, podemos alternar el modo del dispositivo para introducirnos dentro del castillo virtual que hemos construido y decorarlo a nuestro gusto. De este modo dejamos de estar en nuestro salón para sumergirnos por completo en un entorno virtual, es decir, pasamos de realidad aumentada a virtual con el mismo dispositivo.
Aunque hasta la fecha el principal problema de la realidad mixta era su precio, comenzamos a ver las primeras opciones comerciales de calidad. Recientemente se ha lanzado al mercado el visor Quest 3 de la empresa Meta con un precio de partida de unos 550 euros, y en el primer trimestre de 2024 está previsto el lanzamiento del dispositivo de realidad mixta Apple Vision Pro, que ha creado una tremenda expectación.
Retos para la realidad extendida
Un artículo de Forbes de 2019 señalaba que se esperaba que el mercado de la XR generase 209.000 millones de dólares para 2022. La realidad es que, según los análisis de mercado más recientes, en 2022, lo que generó este sector no llegó a los 93.000 millones, menos de la mitad de lo esperado.
El mayor escollo que debe salvar la realidad extendida para alcanzar ese nivel de implantación que algunos esperan es mejorar la accesibilidad. El hecho de que aparezca como algo tan exclusivo, hace que para muchos sea una posibilidad lejana e incluso genera escepticismo sobre sus posibilidades.
Si se superara esta falta de popularidad y se acudiese en masa a esa realidad digital alternativa en la que se puede actuar como en la vida real, se abriría la puerta a otras cuestiones, por ejemplo, éticas o legislativas.
Aplicaciones de la realidad extendida
Hoy en día, las experiencias de realidad extendida son útiles cuando se limitan a determinados objetivos y se ofrece valor añadido de una manera concreta y verificable. De hecho, son varios los sectores que ya aprovechan las ventajas de este tipo de experiencias ‘multi-realidad’ que utilizan uno o varios de los componentes de la realidad extendida.
Formación
Cada vez son más los estudios que demuestran las ventajas de utilizar realidad extendida en educación o para la formación de profesionales, desde simuladores de vuelo hasta formación en el uso de nuevos sistemas o equipos.
Por ejemplo, se calcula que, mientras que la capacidad de retener lo aprendido en una clase es del 5% y a través de la lectura del 10%, con la realidad virtual es del 75%. Por su parte, la realidad aumentada ofrece grandes ventajas logísticas y de accesibilidad, ya que permite simular cualquier objeto o situación en cualquier espacio (centro de formación, domicilio, etc.)
Ingeniería
Del mismo modo, estas tecnologías facilitan el trabajo a la hora de diseñar productos o procesos. La realidad extendida forma parte de la llamada Industria 4.0, que utiliza las nuevas tecnologías para ser más eficiente.
Comercio
Las experiencias de realidad extendida se pueden integrar en distintas fases del proceso de venta de un producto. Desde su uso en marketing y atención al cliente, hasta la posibilidad de ver o probar los artículos antes de adquirirlos, lo que facilita mucho la decisión de compra.
Una de las funciones más populares, que no la única, es utilizar la realidad aumentada para poder probar o ver cómo quedan determinados objetos en un espacio. Amazon, por ejemplo, lleva ofreciendo esta posibilidad desde 2017. Ahora, además, es más sencillo para el cliente porque con la web AR accede directamente al catálogo en 3D. Un catálogo o un menú como el que desarrollamos en Foodiverse, la primera carta con realidad aumentada a la que se accede desde el navegador.
Salud
Además de utilizarse para la formación y la atención en remoto, la realidad extendida también se está integrando en distintos tipos de terapia. Por ejemplo, en el King ‘s College de Londres, se está utilizando en la investigación clínica del trastorno bipolar.
Entretenimiento
Se suele relacionar realidad extendida con gaming, pero tiene muchas otras aplicaciones. Se puede utilizar para mejorar experiencias culturales como la visita a museos o destinos turísticos, o los contenidos audiovisuales, con los que se puede interactuar.
Dentro de las aplicaciones de la realidad extendida para el tiempo libre, también podemos incluir las relacionadas con el deporte y el bienestar. Por ejemplo, se está empezando a usar bastante las experiencias inmersivas de la realidad virtual en sesiones de mindfulness.
También estamos viendo cómo se populariza la introducción de las tecnologías de realidad extendida en diversas redes sociales. Una muy popular es la del maquillaje virtual con realidad aumentada; son varias las compañías (Sephora o L’Oreal) que están invirtiendo en redes como Pinterest para potenciar esa asociación entre redes sociales y realidad extendida.
Eventos
La realidad virtual, por ejemplo, permite celebrar eventos que se pueden limitar a grupos privados y ofrecen experiencias únicas que probablemente no serían posibles en una reunión física. Por otro lado, también en los eventos presenciales se pueden incorporar experiencias de realidad extendida para dar más valor al encuentro y que sea más memorable y efectivo.
Las posibilidades de la realidad extendida son tantas, que podríamos seguir poniendo ejemplos. El único límite está en la imaginación. En Many·Worlds contamos con más de 15 años de recorrido creando todo tipo de experiencias con estas tecnologías. Contacta con nosotros y cuéntanos tu idea sin compromiso.